¡SUPERCRÓNICA RELOAD!

Los Vengadores de Tapia

El domingo 10 de Mayo, ante la ausencia del 98% de los Toquetones de Monky, hizo su presentación un nuevo equipo en las canchas de la Rural, cargado de figuras de la Banda del Tano, cuya misión es evitar que los gorditos inútiles, los jugadores mediocres como Boya, Sapo y Bachi sean figuras en las crónicas, desterrando al olvido al antiguo y místico 9 goleador: los Vengadores de Tapia, con su delantero estrella como capitán, el Pulpo Hulk, comandando a super héroes del futbol: Nariz de Halcón Tapia, Wood Man Sipalky, Capitán Latinoamérica Zamora, y un par de Viudas Negras tras el alambrado. Algunos rumores anuncian la presencia próxima de otro combinado, Los Cirujas de Dipa, que harían su presentación en las vacaciones de invierno, con el licenciado Emilio "Diógenes" Basso a la cabeza, completando la mitología de seres extraños que habitan en la Rural.
Durante el trámite de un partido parejo, cuyo marcador se modificaba constantemente, se lució el "no te perdono ni una" del Boya, que convirtió un golazo desde atrás de media cancha mientras el arquerito rival buscaba una pelota de otro partido, justamente cuando atajaba el pendejo debutante Nahuel Zamorita, que clavo varios golazos para los Vengadores.
Un travesaño alucinante de Zamora padre, los golazos de un Pulpo intratable ("sos Hulk mi amor", se escuchó desde la tribuna), anunciaban un super-partido, más que parejo. La jugada de la noche podría haber sido la ya clásica "atajada increíble a Pulpo y contrataque fatal del arquero con gol incluído de la Avioneta Alba", pero una bachicheada ladina, cambió el destino del partido.
Cuando faltaba tan sólo unos minutos para terminar el encuentro, con el partido empatado, mientras Sapito reclamaba en el área de sus rivales un penal inexistente, utilizando todo tipo de argumentos apócrifos y silogismos trampeados, Bachi sacó rápido un córner que permitió, mientras todos discutían, que la Banda del Tano le punguera el partido a Los Vengadores de Tapia.
"¡¡¡GOOOL, GOLAZOOO!!!", gritaron los de la Banda, y se abrazaron en un festejo interminable, mientras abandonaban disimuladamante la cancha. "Pará, no estábamos ni jugando", quisieron defenderse los Vengadores, pero ni el mismísimo Hulk los pudo salvar de la inevitable Victoria de Facto de la Banda del Tano... ¡¡Grande Bachi!!!

Toquetones Reload

El último domingo, con varios Toquetones presentes, y con su propio capitán Monky a la cabeza, la Banda del Tano cedió en préstamo al querido Daniel Beron, para que se luciera entre los rivales.
Lo que aparentaba ser un partido fácil, con una goleada con buen fulbo por parte de la Banda del Tano, que por momentos hacía recordar las épocas doradas del Barcelona, sufrió una terrible recaída que puso a los Toquetones a tan sólo un gol del empate, faltando cinco minutos para terminar el partido: una tormenta de talento de Daniel "el Tanque" Berón, que lo convirtió en la figura a partir de golazos llenos de buen pié y precisión, la mayoría a través de definiciones cargadas del vértigo propio de una cámara slowmotion.
Parece ser que todo jugador a préstamo en los Toquetones, se convierte automáticamente en figura, pero ni el arrebato de talento del Tanque pudo terminar con el hoyo del golero Sapito, que con los palos, el pecho, la pata, el hombro, la cara y los huevos (literalmente), sacaba todo lo que le tiraban.
La jugada del partido la protagonizó el ex-monstruo goleador, errando el gol mas fácil de convertir de toda la historia: no tenía ni que tocarla, entraba solita, pifiándole a la pelota era golazo, pero él la tiró a la tribuna. El antes goleador, hoy es una triste caricatura, un nueve con una panza que pide cesarea urgente, que en el área ya ni arrastra una marca, sólo hace sombra y algún que otro chiste.
Con la recuperación anímica de la Banda del Tano, inspirada en el hoyo de su arquero, lograron meter dos millones de contras fatales en un minuto, convirtiendo entre Goni y Pulpo, unos 354 goles que sentenciaron el encuentro.
A pesar de la goleada final, fue un gran partido, un buen regreso de los Toquetones, que a pesar de jugar bien, recibieron un valdazo de realidad: fueron aplastados por la superioridad sostenida de la Banda del Tano, que está empezando a acostumbrarse a esa rara sensación que es ganar, estando de cualquier lado de la cancha... ¿se verá una versión Reloaded de los Toquetones para el próximo domingo? ¿Volverá el Blem? Las teclas esperan ansiosas poder relatar el próximo capítulo de la historia grande del fútbol de la Rural, una historia donde no hay barras, gas pimienta, ni intereses económicos manchando la pelota: es simplemente el mayor placer de los mortales, la mas popular expresión del arte; sólo fútbol.

UNA CRÓNICA DIVIDIDA

La Vergüenza de los Toquetones

8 a 1, en menos de 20 minutos. La paliza que la Banda del Tano, sin la presencia del Tano, lo propinó a los Toquetones de Monky, fue humillante. Los pibes tocaban como el Barza, jugaban de primera, desbordaban, pisaban la pelota, goleaban tranquilos.

Con el debut de Andrés y la vuelta del Diablo, y un Boya resaqueado en camisa y corbata, sin siquiera cambiarse de la noche anterior, acompañados de un Goni imparable en todos los sectores de la cancha, estos buenos muchachos demostraron quienes mandan en las canchitas de la Rural. La desolación del rostro de Monky, reflejaba el ánimo frustrante de una derrota inminente de los Toquetones. 

El Boyita, fuera de la cancha y ya vomitando, dejó a la Banda del Tano con uno menos, y la llegada tarde de un par de pibes de la Banda, que se incorporaron uno para cada equipo, anunciaron el comienzo de otra historia. 

Los Tentáculos del Milagro

8 a 1, hasta que Pulpo, la figura indiscutida de la Banda del Tano, se convirtió en el héroe de Los Toquetones de Monky: pateó 14 veces al arco y convirtió 77 goles seguidos. Así fue que descubrimos el porqué de su apodo: el Pulpo la pisa con la izquierda, la acaricia con la derecha, le pega con la del medio, como si amasara con sus tentáculos una perla preciosa en el fondo del mar.
"Quedan cinco minutos", anunció la voz del estadio. "¿cómo que cinco? ¡Necesitamos como veinte!" se quejó Tapia, y le dieron los veinte. El arco de la Banda del Tano parecía Hiroshima: era arrasado cada minuto por los bombazos atómicos de un Pulpo encendido.
Atrincherados, tratando de sacarla como podían y contratacando con más coraje que astucia, los gorditos de la Banda lograron mantener la paridad de esta segunda parte del encuentro hasta el último minuto, transpirando amor propio y dignidad, pero otro misilazo fatal de Pulpo cerró la historia.
"8 a 1... ¡Que partido dimos vuelta!", se decían a sí mismos unos orgullosos Toquetones, anunciandose vencedores. "Su felicidad es la misma que la de un nene al que su papá lo dejó ganarle en los penales", le respondieron los de la Banda, argumentando que su goleador y figura, que cambió de raiz el partido, es un pibe de la Banda del Tano.
Una Victoria Anímica para los Toquetones de Monky, una Victoria Tácita para los de la Banda del Tano, y todos se fueron contentos y creyendo unos zoquetes a sus rivales, en medio de un claro empate por fallo dividido.

EL FIN DE UN MITO

Pincelazos de una crónica atrasada

El último partido de Abril se inició con grandes figuras históricas en el banco: Sapo, Bachi y Boya se quedaron de arranque en su mejor posición: la tribuna. Pero ante la falta de amigos chéveres, Sapo se vió obligado a atajar para al equipo rival de su corazón: Los Toquetones de Monky.
El trámite del juego dibujó un partidazo, donde las pinceladas de magia las dieron las figuras mas bolicheras de la cancha: los reyes de la pista en Show Kolor Show.
"Entra boya, cambiate", se escuchó a raíz de una lesión, y el defensor de peso de la Banda del Tano, se resignó a su cruel destino: tenía que jugar,
Hasta ese instante del tiempo, la figura indiscutida de la cancha era Sapito, que irónicamente, le sacaba pelotas increíbles al equipo de sus amores: en los bares se debate si estamos ante un gran profesional o un vil traidor.
Tras un contrataque veloz del goleador Pulpo, se escuchó decir "No Boya, muy rapido", al propio Boya, que ya empezaba a sorprender con su timing a propios y extraños.
Tano se vió frustrado, debido a la clara disminución de su producción golera, mitad culpa de la suerte, mitad responsabilidad de las tenazas del Cangrejo Alba, que aunque iba para atrás, seguía salvando a los Toquetones.
La jugada del partido otra vez la protagonizó el Iluso de Tapita, que quiso tirar la pelota por un lado e ir a buscarla por el otro frente al Gran Boya: el resultado obvio es que perdió la pelota, sin tener la más mínima chance de alcanzarla, porque como todos sabemos, al Boya es más facil quitarle una birra que darle la vuelta.
El susto más grande de la fecha nos lo dimos cuando Tapia, otra vez en un choque con el Boya, fingió una lesion: tras el alambrado sólo quedaban el Guille lesionado, Bachi y la popular femenina. Sin dudarlo, todos gritaron "cambiate Lihue, vos entrás", mientras Bachi se sentaba nuevamente, despacito, como quién nunca quiso entrar.
Cuando el arco se les cerraba a los del Tano, mientras el defensa Señor Sipalky seguía jugando un partidazo, al nivel del hijo no reconocido de Mascherano y Bruce Lee, llegó el ansiado gol que cambió para siempre el resultado del encuentro: tras un pelotazo cruzado bien abajo, que Sapo sólo atinó a tocar, otra vez un golazo del Boya sentenciaba el partido. El festejo estuvo compuesto de Vuelta Carnero y flechazo de Cupido, que llegó hasta Campo Verde. El inconsciente del Boya, tras arrojarse al piso, no tuvo en cuenta las consecuensias sísmicas de su desmedido festejo, por lo que se espera una nueva erupción del Calbulco para los próximos días.
Minutos mas tarde, no tardaría en caer un bombazo de Pulpo, sellando la victoria. La noticia de la noche fue el derrumbe de un mito, puesto que gracias a Sapo y su mufa, los Toquetones de Monky perdieron el encuentro del lado invencible de la cancha.
 Cabe destacar que el resultado final del partido sería apelado por la Comisión Directiva de Los Toquetones de Monky, que reclaman, al menos, haber empatado el encuentro, y acusan al pícaro Ingeniero Liberosky de haber contado malintensionadamante los tantos.
El misterioso mensaje de aliento por parte de una sexy señorita, que convirtió al Boya en el jugador del partido, nos regaló el desafío mas parejo de la historia, y promete hacer surgir una nueva figura de las cronicas de Burritos, una figura que amenaza con quitarle la popularidad al mismísimo ex-goleador Tapia... ¡¡¡Grande Boyita!!!